La Académica burgalesa doña María Jesús Jabato Dehesa ha escrito un magnífico trabajo sobre los pormenores de la muerte del rey niño, Enrique I de Castilla.
Sin este accidente desgraciado y fortuito, Autillo hoy no celebraría el suceso más importante de su apasionate y rica Historia, el VIII Centenario de la proclamación de Fernando III el Santo como rey de Castilla.
Estas fotografías con el cráneo trepanado del rey Enrique I ya las expusimos en diapositivas, tras la primera representación teatral que se hizo de la coronación en 1991, en la plaza del pueblo, frente al bar de Adelina. Por tanto, "Καὶ οὐκ ἔστιν πᾶν πρόσφατον ὑπὸ τὸν ἥλιον", más conocido como "nihil novum sub sole", o lo que viene a ser "nada nuevo bajo el sol", que dicho de otro modo, nada que no se haya inventado o conocido antes.
Tras la primera representación teatral que se hizo en 1991 de esta parte de la Historia del pueblo, y que fue un éxito absoluto, Paloma Castro, una brillantísima estudiante de Bachillerato por aquel tiempo, y la hábil calígrafa en letra gótica que escribió el texto del mural que se pintó en la plaza, nos dio una magnífica charla sobre las tumbas reales del monasterio de las Huelgas de Burgos. En ese contexto se proyectaron las diapositivas donde se vieron por primera vez estas fotos del cráneo trepanado del rey Enrique. Han trascurrido ventiséis años desde entonces, pero los buenos recuerdos permanecen aún muy vivos, como si fuera ayer mismo.