Juan Santiago Fernández Rodríguez es un autillano por los que yo siempre he tenido un afecto especial. Adora a su pueblo, son de ese tipo de personas que podría veranear en cualquier otro sitio, uno más exótico, pero no se deja engañar por espejismos. Juan necesita estar en su pueblo para ser feliz. Solo hay que verle hablando de Autillo y la sonrisa en su boca para darse cuenta de la conexión que tiene con su pueblo. De pronto Julio y yo nos dimos cuenta de que Juan tiene unas habilidades y aficiones que le hacen diferente y que dos cazatalentos como nosotros hemos captado a la primera. Es demasiado valioso como para no abusar de su buena voluntad, aprovechando el acendrado cariño que tiene a nuestro pueblo.
En el blog de Autillo ya Julio publicó alguna de sus fotos nocturnas. Son sencillamente buenas, de las que te meten de forma mágica en ellas y te traen recuerdos imborrables. Por eso, conocedor de su habilidad como artista de la fotografía en condiciones de luz muy precarias, le sugerí que hiciese una foto de un plano catastral de Autillo colocado en una pared muy escasamente iluminada. Abajo podéis ver el resultado. Les aseguro que era casi imposible hacerlo, pero él lo consiguió, y doy fe que tuvo que hacer milagros.
Todos los autillanos, gracias a él, por fin disponemos del plano donde están nuestras tierras, y nuestros caminos y arroyos. Es un plano en alta resolución que podrás descargar en un pen y llevártelo si quieres a una reproductora de planos y que te lo pasen a papel: ideal para adornar una bodega para las meriendas, mientras resulta muy difícil no mirarlo por el efecto hipnótico que produce, yo lo aviso...
Pronto publicaremos los planos parcelarios de comienzos del siglo XX, donde se aprecia cómo eran las parcelas de antes de la Concemtración Parcelaria, y el río antes de su canalización. Fue Juan quien me hizo el favor de acudir al Archivo Histórico Provincial y sacar una copia para todos nosotros. Pero de eso ya hablaremos otro día.
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